HERMOSILLO, SONORA. MX. — La dirección de Programas Nacionales Estratégicos del Conahcyt aprobó a la Universidad de Sonora un proyecto de investigación denominado “Ciudades resilientes al cambio climático”, el cual tiene colaboración interdisciplinaria para recuperar y restaurar el ecosistema del desierto de Sonora en entornos urbanos para mejorar la calidad del aire.
Diana María Meza Figueroa, profesora investigadora del Departamento de Geología y titular de la Dirección de Apoyo a la Vinculación y Difusión de la alma mater, señaló que hay poca investigación en el país en temas de calidad del aire que caracterice lo que se respira; pero, afortunadamente, la Universidad de Sonora tiene varios núcleos académicos que se enfocan a la disposición del aire.
Dijo que el proyecto busca empoderar a la comunidad para mitigar las emisiones de contaminantes, en particular de los autos, pues se sabe que Hermosillo tiene un problema serio de la movilidad y también se tratan de identificar los efectos en la salud de las emanaciones de estos automóviles.
Trabajo coordinado
El estudio tiene colaboración entre grupos de investigación consolidados de varias instituciones, donde la Universidad de Sonora tiene el liderazgo, pero participa el Instituto Tecnológico de Sonora (Itson), El Colegio de Sonora (Colson), el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), la Universidad Estatal de Sonora (UES), la Universidad Estatal de Arizona, la Universidad de Arizona y un Instituto de Singapur.
“Lo que se hace es un trabajo de punta porque se caracterizan las partículas en tamaño nano que respiramos y, para ello, se utiliza tecnología con la que cuenta la Universidad de Sonora, lo que muestra la madurez científica de la institución al poseer equipo moderno para realizar la caracterización de los materiales contaminantes.
“Se quiere entender qué emiten los vehículos que puede ser un potencial para la afectación de la salud, porque las partículas que son ultrafinas y finas, menores a 2.5 micras, pueden llegar al interior del macrófago del pulmón y estadísticamente existe una relación entre la exposición de estas partículas y la incidencia de enfermedades cardiovasculares”, explicó.
Comentó que Hermosillo es una de las ciudades con más casos relacionados a problemas con el corazón y los vasos sanguíneos y se quiere entender cuántos de estos padecimientos son por la exposición ambiental, agregando que las enfermedades respiratorias inciden en la calidad de vida de todos, desde niños hasta la tercera edad.
Detalló que se tiene un inventario de calidad del aire desde el 2014 a la fecha, el cual se obtiene con drones que poseen sensores para poder medir las fuentes puntuales como son las ladrilleras y calles con mayor presencia vehicular. Además, se analizan alrededor de 10 compuestos, caracterizando las partículas con diferentes metodologías.
“Dentro del proyecto también se tiene un programa de Ciencia Ciudadana, donde las personas nos envían polvo que se recoge durante la limpieza de sus casas y ese material se procesa hasta obtener la partícula más fina, la cual se respira al estar en la vivienda y esos fragmentos se caracterizan para saber a qué está expuesta la persona y le damos un reporte y estrategias para reducir la cantidad de contaminantes en el interior de la residencia”, abundó.
Concluye en 2024
La profesora investigadora reveló que el proyecto tiene dos años y concluye en el 2024; además, el tema de investigación generó por primera vez el Inventario de contaminantes de gases efecto invernadero y contaminantes climáticos de vida corta en Hermosillo con un primer reporte y el segundo se entregará en el mes de octubre donde se encontraron cosas interesantes y preocupantes.
Informó que los reportes se entregan al Ayuntamiento de Hermosillo, Comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora (Cedes), Procuraduría Ambiental del Estado de Sonora y a Hermosillo ¿Cómo Vamos?, y también se tiene la información en la página del Observatorio Socio Ambiental www.observatorio-socio-ambiental.mx
“Todos los filtros que se analizaron de aire tienen valores altísimos de níquel, es un elemento que se asocia mucho al estrés oxidativo que genera cuadros de inflamación en la persona y lo hace vulnerable a complicaciones de enfermedades prexistentes o que adquiera una enfermedad.
“Sabemos que hay una incidencia de partículas PM2.5 todo el año en Hermosillo, lo que se traduce a que los hermosillenses estamos crónicamente expuestos a partículas que llegan al interior del pulmón en la parte más profunda y genera cuadros de estrés oxidativo, es importante recordar que dicho concepto se habló durante la pandemia por covid, que eran situaciones que producían inflamación crónica y al padecer coronavirus se complicaba”, indicó.
Los hermosillenses tienen esas inflamaciones sólo por respirar. Es un proyecto que está proporcionando mucha información que permitirá que se trabaje juntos en proponer soluciones para reducir esa carga atmosférica, sostuvo Meza Figueroa.
Acciones a implementar
Entre las acciones a implementar, sugirió la más importante, una campaña de reforestación en la capital del estado, pues se acaban de obtener los resultados de las proyecciones del clima al 2050 y se habla de un incremento de cuatro grados en la temperatura superficial y con paso lento se está emigrando a un ecosistema muy desértico.
“Se trabaja con colectivos ciudadanos en la reforestación con plantas nativas como el mezquite y palo verde, porque se ha demostrado que capturan más material particulado y reducen la exposición de estos componentes en las personas. La ciudad no tiene áreas verdes y los parques no son suficientes; prácticamente es una obligación moral que cada familia de Hermosillo siembre mínimo dos árboles en los hogares y ayudará a mejorar la salud y evitar deterioro de la ciudad”, concluyó.
Al celebrar el 7 de septiembre Día Internacional del Aire limpio por un Cielo Azul, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que cerca del 99% de la población mundial está respirando aire que contiene diferentes niveles de contaminantes en concentraciones que afecta de diversas formas, en particular la preocupación del aire en países en desarrollo o bajo ingreso pre cápita.
Las enfermedades respiratorias involucran un costo y baja calidad de vida, provocando la inasistencia en clases y ausentismo laboral por problemas respiratorios que incluye al asma, alergias y problemas cardiovasculares.
PUBLICADO EL 06 SEPTIEMBRE DE 2023/ Con información de GOBSON 0923-026)