Cada que ocurre un fenómeno astronómico relacionado con la Luna, algunas personas creen en algunos mitos, sobre todo, si una mujer embarazada está involucrada.
Y es que las creencias sobre supuestas afectaciones a los bebés si son expuestos a la luz de la Luna han pasado de generación en generación.
Algunos de los mitos más comunes son relacionados con presuntas malformaciones, como labio leporino o alguna falla en la formación de una extremidad del bebé.
También estas falsas creencias alegan supuestos problemas en la piel de la madre o del bebé, como lunares, manchas o cicatrices.
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Para evitar estos sucesos, las personas en la antigüedad usaban un listón rojo atado a la cintura de la madre embarazada, o al cargar un objeto metálico como cucharas, tenedores o tijeras para evitar los supuestos efectos malignos del eclipse.
Otra creencia es alejar las malas vibras del bebé al golpear cacerolas o gritar durante el suceso astronómico.
Sin embargo, como ya mencionamos, estas creencias son falsas y no tienen ningún sustento científico. Que una mujer embarazada salga a apreciar un eclipse NO produce efecto alguno sobre el producto en su vientre.
Para cualquier duda sobre la formación de un bebé, las mujeres deben acudir a su médico ginecólogo u obstetra, quienes tendrán las mejores respuestas al respecto.
(Publicada el 25/05/2021 /Con información de La opinión)